Libro 15, 2020.

No sé como empezar con esto... Ha sido una total decepción. De principio a fin. Y eso que no tenía las expectativas muy altas.

Nos presentan a Lily, una chica española que va a Londres a estudiar su último curso de economía con una beca. Allí conoce a Ava y Meredith, quienes la acompañan en sus primeros días. Después se les unen Rex, Martha y Connor. Y empieza una espiral de cosas sin sentido.

Vamos por partes. Cuando empecé el libro, veía que había unos personajes que podían salvarse. Lily, Tom, Finn, Ava y Connor. Los demás me caían demasiado mal ya desde el principio del libro. Estoy llegando a pensar que me he hecho demasiado mayor para este tipo de libros, pero bueno. A medida que pasaba el libro, empecé a descartar personajes. Quedándome como salvados a Ava y Connor. Y así se ha quedado al final. Puede que Lily también se salve, pero aún tengo dudas.

El libro empezaba muy bien, con Lily llegando a Londres y adaptándose. Sin embargo, a medida que pasa el libro, siento que las situaciones estaban muy forzadas, todas desembocando en crear drama porque sí. Totalmente forzado y gratuito.

Por otra parte, algo que me sacaba de quicio eran los puntos de vista. ¡Demasiados! Puedo asegurar que todos los personajes que salen en el libro, tienen mínimo un capítulo dedicado a su punto de vista en alguna situación. Creo que habría sido muchísimo mejor haberlo hecho en tercera persona, y contarlo todo con linealidad, explicando sus sentimientos y lo que piensan, pero definitivamente no con tanto cambio de perspectiva.

Oliver es sin duda el personaje que más he odiado, es todo lo que está mal de una persona. Y, sobretodo, todo lo que está mal de un novio, o exnovio, en este caso. Es demasiado tóxico. La persigue por Londres, la espera fuera de la residencia/hotel dónde se aloja, le hace fotografías desde lejos. Y, lo peor de todo, se alegra de verla destrozada.

Martha y Meredith son dos personajes más que me han caído en desgracia. Toda la estupidez humana que ha podido reunir la autora la ha concentrado en ellas dos (y Oliver).

El punto positivo de este libro, es la autora. Ha sabido transportarme a Londres y hacerme una visita turística, explicarme cosas que no conocía y recordándome las que sí. Aunque el libro no me haya gustado nada, principalmente por el manejo de los personajes, creo que le voy a dar más oportunidades a la autora, porque en ella veo potencial para hacer cosas mejores que esta.

En conclusión, no voy a seguir con esta saga. He acabado muy quemada con el primer libro, y según me han comentado, no va a mejor en las siguientes entregas. Así que prefiero dedicarle tiempo a otro libro de Andrea Izquierdo, y dejar este en un cajón.